BÚHO: POESÍA INMERSIVA

España, Reseñas

Javier Ortiz (Productor y gestor cultural) / 26 de octubre de 2023

Búho es, sobre todo, un viaje. Y parafraseando a Vasconcelos, un viaje, como un libro, se empieza con inquietud y se termina con melancolía. Sobre el papel, Búho es la historia de Pablo, un antropólogo forense especializado en yacimientos paleolíticos que ha perdido su memoria. Por eso la búsqueda de sus recuerdos para recuperar su identidad se enmarca en un trabajo espeleológico en busca de sí mismo. Pero Búho es mucho más que su texto. En el mundo real del hospital se tratan temas como la fragilidad, la frustración que produce la enfermedad, la soledad o la pérdida de la identidad al no reconocer nuestro universo de referencia: familia o amigos. Y la protagonista es la palabra. Sin embargo, en el viaje de Pablo por su memoria la protagonista es la plástica, y ahí es donde el montaje cobra toda su fuerza. Al igual que en su mundo real, Pablo, como el espectador, avanza por un espacio donde el tiempo no es lineal y el propio viajero desconoce las reglas de su viaje. El espectador, como el protagonista, debe abandonarse a la experiencia sin esperar otra recompensa que el propio viaje y la belleza de sus imágenes. Y es un placer. Titzina es una compañía que nos tiene acostumbrados a sus relatos fragmentarios para mantener el interés de la historia hasta el final, y a la calidad poética de sus imágenes, y Búho no es una excepción. Se perciben los 2 años de gestación del montaje en la precisión con la que están construidas la investigación y las imágenes y en el uso preciso de los pocos elementos: la luz, las máscaras, la cordada, las paredes. Todo se resignifica en este viaje para sumergir al espectador en un mundo simbólico que, como el búho, le sobrevuela en silencio al abandonar el patio de butacas. Ayudada por las proyecciones, la cueva es también túnel, laberinto, encrucijada, y el espectáculo avanza blandamente hacia su final sin la presión de necesitar llegar a una resolución convencional. Puede que el espectador se desoriente en este viaje, abandone a Pablo, su Ariadna particular, y se pierda en el camino. He de confesar que a mí me sucedió lo contrario, y que su viaje me llevó desde la Cueva de Montesinos, a X, de Alistair McDowall, con la que guarda muchos puntos de contacto.

Diego Lorca y Pako Merino interpretan la pieza con un sentimiento de facilidad que enmascara la exigencia y precisión con la que realizan su trabajo. La escenografía es tan sencilla como eficaz, y las proyecciones se usan con sentido y añaden capas de profundidad a la propuesta. Mención especial merece el hallazgo de las pinturas rupestres, que no quiero desvelar por su particular belleza.

Recomiendo asomarse a este viaje que nos ofrece Titzina por el placer que produce adentrarse en su propuesta, por los lugares a los que nos llevan, y por lo que el espectador, cada uno, puede encontrar detrás de sus símbolos.

Búho – Titzina Teatro

FICHA ARTÍSTICA

Idea y creación: Diego Lorca y Pako Merino
Dirección: Diego Lorca y Pako Merino
Dramaturgia: Diego Lorca
Interpretación: Diego Lorca y Pako Merino
Composición musical y sonido: Jonatan Bernabeu y Tomomi Kubo
Iluminación: Jordi Thomàs
Espacio escénico: Rocío Peña
Construcción escenografía: Albert Ventura y La Forja del Vallès
Diseño proyecciones: Joan Rodón
Vestuario: Ona Grau
Diseño gráfico compañía: Isa Besset
Dirección técnica: Albert Anglada
Producción: Luz Rondón y Tanya Carp
Fotografía: Quim Cabeza
Técnicos en gira: Jordi Thomàs, Sergi Cerdan Aguado y Txell Cabanas Collell

Búho, sala José Luis Alonso, Teatro de la Abadía, Madrid. Del 17 al 22 de octubre de 2023.

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