TEATRO EN LA OSCURIDAD

La dramaturgia de lo que ves cuando no ves (1ª Parte)

César Musitani (Investigador y MA en Literatura española e hispanoamericana por la U. de Barcelona) / 18 de mayo de 2021

Quizás de todos los sentidos, la vista sea el que más incidencia acapara en una representación teatral. Las imágenes de los cuerpos en movimiento, la comunicación gestual, los desplazamientos de actores, los detalles de la utilería y del vestuario, los colores, los efectos lumínicos, nos proporcionan una rica expresión de la poiesis escénica. Pero ¿qué pasa si eliminamos el sentido de la vista para disfrutar del teatro? ¿Puede haber teatro sin la experiencia visual? La respuesta es un rotundo «sí»… y esa es la propuesta del teatro en la oscuridad, una dramaturgia que no solo invita a la experiencia de clausurar el sentido de la vista para disfrutar de lo performativo, sino que también ofrece una puerta de entrada a un mundo donde se puede «ver» con los ojos de todos los otros sentidos la acción dramática a través de la imaginación auditiva, e incluso enriquecida con experiencias táctiles, olfativas y del gusto. La dramaturgia de la oscuridad es una experiencia inmersiva que sumerge a la audiencia en un mundo diferente y que en gran medida puede ser comparada a una experiencia artística que trasciende nuestra realidad habitual hacia otra realidad superior donde, como en la meditación del mindfulness, uno se siente más presente y consciente en el aquí y ahora de lo que ocurre en la representación artística.

«En el teatro, la gente entra a un salón a oscuras y ahí sucede la obra… el espectador no ve absolutamente nada de lo que ocurre en la sala… mientras nosotros trabajamos con nuestras voces, con la música, con efectos sonoros, lluvia, viento, todo lo que es no visual», nos dice Martín Bondone, fundador de la compañía Teatro Ciego en Argentina, hace algo más de doce años. La técnica de teatro ciego o teatro a ciegas tiene sus orígenes en una obra creada por Ricardo Sued y presentada en 1991, en Córdoba (Argentina), sobre la base de la meditación Zen tibetana en la oscuridad. La idea se retoma a inicios del nuevo siglo por parte de Gerardo Bentatti, miembro original de aquel elenco inaugural, pero convocando esta vez en su mayoría a actores ciegos. Después de haberse entusiasmado con el teatro en la escuela secundaria, haber hecho teatro experimental participando en esta nueva modalidad de teatro, Martín Bondone quería hacer más que simplemente representaciones aisladas. Esa necesidad de contar con un espacio empezó a cuajar, y Bentatti y Bondone se embarcan en el «ambicioso proyecto de poner en funcionamiento el Centro Argentino de Teatro Ciego. Luego de mucho trabajo y esfuerzo, el 4 de julio de 2008 abre sus puertas el primer Teatro Ciego del mundo, un espacio donde todos los espectáculos son presentados en la más absoluta oscuridad, buscando el desarrollo cooperativo e igualitario de sus miembros».

Para Martín Bondone, el teatro en la oscuridad es como una rama del teatro de los sentidos, que surge en los noventa después de la caída del muro y que se emparenta de algún modo con las dramaturgias de lo real. «La técnica de teatro ciego es una rama de eso mismo que viene a ofrecer realidad en una experiencia directa, ya sea degustando un bocado u oliendo un aroma. Cuando vos le entrás por ese lado al espectador lo conmovés, le estás dando un realismo que lo interpela en su sensorialidad». Al hacer lo performativo en la oscuridad «se quita todo velo de artificialidad. Cuando estás en la oscuridad, la conexión con los actores es total, porque no hay interferencia, no hay distracciones, no hay mediación». De algún modo, esta dramaturgia de la oscuridad se puede relacionar con una experiencia lectora donde la mente crea imágenes extraídas de lo leído. En el teatro a ciegas, esa creación de imágenes en la imaginación es creada por actores que hablan, músicos, técnicos que generan sonidos y efectos sensoriales de toda índole. Bondone nos cuenta de un reto que plantea esta modalidad, ya que «en el teatro ciego hay una lucha entre lo sensorial y la historia que se cuenta. Lo sensorial tiende a llevarse los laureles». Por eso, el desafío del dramaturgo, de la dirección, de la producción y de cada integrante involucrado en este teatro en la oscuridad es la de «hacer que tanto la experiencia sensorial como la historia sean conmovedoras. (…) En la teatralidad de la oscuridad también se crean imágenes, pero son imágenes que tienen que ver con la misma etimología de la palabra, con «imaginar»: son las imágenes mentales» que deben conmover a quien tiene la experiencia de presenciar y hasta incluso de alguna manera también ser protagonista en la acción dramatizada. 

 Teatro Ciego viene realizando, desde su creación, espectáculos en total oscuridad que invitan a la audiencia a jugar más allá de los límites visuales. Estas producciones incluyen no solo obras de teatro en la oscuridad, sino también propuestas sensoriales y artísticas inmersivas de toda clase, meditativas, degustativas, divertimentos no visuales, y hasta inclusive presentaciones para niños en escuelas y presentaciones de mercadeo y motivacionales para empresas y corporaciones. Hacia 2019, Teatro Ciego pone en escena Sapo de otro pozo, obra que explora la vida desde la perspectiva de una persona ciega que no encaja en la realidad y donde la audiencia tiene la opción de experimentarlo todo desde esa perspectiva.  

Por entonces, empieza a surgir la idea de expandirse más allá de las fronteras como fruto de sólidas alianzas internacionales con otras compañías teatrales. Teatro Ciego así también está en Colombia y también supo dar ya el gran primer paso para incursionar en los Estados Unidos.

Hacia la primavera de 2019, Carlos Armesto, un talentoso hombre de teatro estadounidense de ascendencia hispana, productor y director de Theatre C de Nueva York, viaja a Argentina y se conmueve por lo que él llama el «¡Wow!» de esta experiencia dramática sensorial no visual. Así es como se asocian Teatro Ciego y Theatre C para dar vida a una nueva organización teatral con sede en los Estados Unidos: Pitchblack Experience. Martín como dramaturgo (texto dramático) y Carlos como dramaturgista (texto espectacular o escénico) se ponen a dar forma a las ideas ensamblando texto, historia, experiencia sensorial y su potencialidad para impactar a un público internacional. Así Sapo de otro pozo, obra que principalmente estaba pensada para un público local argentino, expande su territorialidad en la acción dramática para convertirse en Odd Man Out. La obra se estrena en Buenos Aires en octubre de 2019. En febrero de 2020, este espectáculo teatral de experiencia inmersiva en total oscuridad, proyecto artístico sin precedentes de coproducción internacional, hace una workshop presentation en el Consulado Argentino de Nueva York, con actores estadounidenses, gran parte de los cuales tienen discapacidad visual, que ensayaron en Argentina y que aquí presentaron extractos de la obra. Los participantes se quedaron fascinados por la experiencia diferente de vivenciar este teatro out of the box. Carlos Armesto dice que la experiencia multisensorial generó elogios de parte de la audiencia al poder revivenciar emociones humanas de todo tipo, «del sentido de la infancia, de coraje, de una especie de despertar». Esta presentación era en preparación para decir presente en la próxima temporada de teatro neoyorquino, pero primero llegó la pandemia…   

Empujados por el cierre de los teatros y con la magia de la reinvención obligada, en Teatro Ciego surge la idea, brillante por cierto, de presentar las experiencias sensoriales en cajas que son distribuidas al público para ser experimentadas en su propia casa. Así hay varias opciones de cajas sensoriales donde destaca la Box Gourmet, una historia dramática en audio inmersivo de 360º que se mezcla con la degustación de un menú y bebida a elección. Y Odd Man Out también se adapta a una versión en caja. 

Cómo es el sabor de la vida, cómo huelen las memorias, cuál es el sonido del amor, cuál es el color de las cosas, de la piel, de los seres humanos, Odd Man Out es una experiencia potente para despertar los sentidos no visuales y encender la imaginación en acción. Mediante el uso de tecnología exclusiva de sonido binaural, también llamado 8D u holofónico, cada espectador puede disfrutar con auriculares de una obra que se va complementando con pasos guiados que invitan a explorar recuerdos a través de la interacción con olores, con sabores, con texturas, con la experiencia de ver con los ojos del ser interior. 

La obra nos sienta como pasajeros en un vuelo en PitchBlack Airlines donde viajamos con Alberto, un músico argentino autoexiliado en Nueva York, en su regreso a Buenos Aires después de 20 años. Pero también es un viaje al mundo de sus recuerdos: «la infancia en su casa familiar, su adolescencia, el primer amor que marcaría su vida, los momentos más oscuros de la historia argentina, su exilio en Estados Unidos, su carrera como artista y la búsqueda constante de libertad entre las ciudades de Buenos Aires y Nueva York». En Odd Man Out, el público vivencia la oscuridad desde dentro de los mismos recuerdos de este protagonista, lo que según Martín Bondone establece una intertextualidad con la película Being John Malkovich (titulada Cómo ser John Malkovich en España y ¿Quieres ser John Malkovich? en América), no solo estando dentro de la mente de este músico sino hasta incluso siendo él mismo al experimentar sus sensaciones. La experiencia inmersiva de Odd Man Out dura unos 65 minutos y está disponible en sus versiones de español o inglés, y con opciones a escoger para beber vino argentino, una bebida de la tradicional yerba mate o agua mineral. Una porción de los ingresos de la venta de cajas de Odd Man Out se destina a donación para Visions, una organización sin fines de lucro de servicio social dedicada por entero a ayudar a los neoyorquinos ciegos o con discapacidad visual.

Para ordenar la caja de Odd Man Out (Sapo de otro pozo) o para cualquier otra de las experiencias sensoriales de Teatro Ciego en Argentina, visite su página web en: https://teatrociego.org.

Para ordenar la caja de Odd Man Out en EE. UU. o internacionalmente, visite la página web en http://pitchblackexperience.com/.

En Odd Man Out, el brillante manejo de esta dramaturgia de la oscuridad hace que la representación teatral ocurra en el mejor de todos los escenarios, en el imaginario escénico de nuestra mente. El espectador (si es que así puede llamarse a quien experimenta esta aventura dramática-sensorial) «ve» las cosas desde la perspectiva de este anciano músico ciego, experimentando todos sus recuerdos, sus emociones, estando vivo dentro de su mente. El espectador también es el personaje. El espectador vive la experiencia como si estuviera en los mismos zapatos del protagonista. La experiencia teatral de Odd Man Out en los Estados Unidos está disponible ahora solo para ser disfrutada con la caja cómodamente en su casa, pero pronto habrá una experiencia en la modalidad semivivo en un restaurante neoyorquino (las personas de la audiencia están presentes físicamente, pero cada una con su antifaz experimentando con su propia caja) y después, en 2022, hará su presencia en el circuito off-Broadway de Nueva York, para ser disfrutada totalmente en vivo, seguramente en una sala donde no es necesario que haya un escenario físico. Pero de ello estaremos hablando en el próximo número de Teatro Magazine y también explorando con más detalle la producción de Odd Man Out, quiénes están detrás de esta creación dramática-inmersiva y la historia de Alberto Rinaldi en este puente invisible pero real que conecta Buenos Aires con Nueva York, y de todo lo que se puede ver cuando no ves.